Existen múltiples maneras de hablarle a los clientes con el fin de llevarlos a conocer nuestros productos y así mismo lograr que realicen una compra (desde su perspectiva) o una venta(desde la perspectiva de la marca). Todas las estrategias que se crean alrededor de estos propósitos, tienen algo en común: necesitan ser lo suficientemente creativas y poderosas como para no aburrir al cliente y poder influir en él de la manera más sutil posible. Una de las estrategias que hoy en día han adquirido ventaja y competitividad, es la implementación de estímulos dirigidos hacia el marketing sensorial para aumentar los niveles de ventas.
En términos generales, las estrategias en la exploración y explotación de los sentidos se ha convertido en una de las mejores ventajas de las marcas frente a su competencia, no solo porque tienen fundamento en la experimentación y en la creatividad, sino también, porque influyen en el cliente de una manera mucho más directa de lo que se lograría con otras estrategias. Además utilizan el cuerpo como una herramienta comunicativa de largo alcance gracias a sus efectos bidireccionales: mejora la experiencia del cliente en las tiendas o con la publicidad y mejora las ventas de la marca y el alcance a un público mayor.
¿Cuáles son los beneficios del Marketing Sensorial para una marca?
En muchas ocasiones habrás notado que — así no tuvieras la intención de comprar en un primer momento — ciertos factores pueden cambiar el rumbo de tus acciones o el grado de interés que tienes para realizar la compra o para querer conocer un producto o servicio: el aroma de la tienda, la música con la que ambientan o un comercial creativo visual y sonoramente, pero ¿por qué es qué cosas tan “comunes” como estas pueden llegar a tener un impacto tan potente en cada uno de nosotros? Bueno, esto se lo debemos al Marketing Sensorial.
Este tipo de marketing tiene entonces dos objetivos: mejorar la experiencia del cliente con los productos, servicios y dentro de los establecimientos y además, inducir la venta y así aumentar las cifras, es decir, se busca influir directamente en la decisión de compra.
Ahora bien, las estrategias de marketing sensorial permiten a las marcas volverse mucho más fuertes frente al mercado, esto porque al momento de utilizar a uno o varios sentidos (lo recomendable es trabajar con ellos en conjunto) se crea una conexión emocional con los clientes, fortaleciendo la percepción que tienen de la marca, de la marca o del negocio y así mismo, fortalecer la identidad de marca, los valores y objetivos propios de la misma.
Uno de los retos más importantes para cualquier marca, al hablar de Marketing Sensorial, es que no funciona para cualquier tipo de público, es más, es necesario que las marcas conozcan muy bien a su audiencia y la monitoreen constantemente, para determinar cuáles estímulos pueden ser realmente eficientes y cuáles no. En esto no hay diferencia con otros tipos de estrategias, ya que en todas se debe segmentar la audiencia y analizar sus características e intereses particulares, para que sean efectivas.
Marketing Sensorial: 4 S para alcanzar el éxito
La forma en la que consumimos productos y servicios ha cambiado de muchas maneras durante los últimos años. Como clientes, no nos conformamos solamente con el objeto o con el servicio; cuando una marca busca algo de nosotros, es común exigir algo más allá de eso, por ejemplo, la creación de emociones o experiencias. El Marketing Sensorial hace uso de 4 S fundamentales — según Pablo Mercado — para alcanzar resultados prometedores con clientes potenciales:
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Sensaciones
Las sensaciones son las reacciones que se producen en nuestro cuerpo a partir de la estimulación de nuestros sentidos, esto quiere decir, que son todas aquellas acciones que provienen de lo que percibimos a través de la vista, el oído, el gusto, el tacto y el olfato. Las marcas deben estar enfocadas a que todas sus estrategias, especialmente las relacionadas con marketing, vayan más allá de convencer al cliente de las ventajas que tienen sus productos o servicios; también, deben enfocar gran parte de sus esfuerzos en que los clientes sientan — literalmente — a la marca, sientan su olor, sus sonidos y sus demás características materiales.
Los estímulos sensoriales son aquellos que producirán mejor recordación y retención de la marca en la mente de los consumidores. Las sensaciones son la base del éxito.
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Sinestesia
¿Has escuchado sobre la sinestesia? En el momento en que recibimos algún estímulo sensorial, no solamente generamos una reacción a partir de un sentido específico, sino que muchas veces, tenemos reacciones secundarias que complementan la experiencia sensorial de la que estamos haciendo parte. Muchas personas tienen esta capacidad más desarrollada que otra y, lejos de ser una enfermedad, se convierte en un atributo sensorial.
El marketing sensorial se apoya de la sinestesia mediante la creación de estímulos sensoriales dirigidos a varios sentidos que en conjunto pueden crear diferentes sensaciones, por ejemplo, una imagen que visualmente sea muy atractiva, pero que a su vez tenga la capacidad de traer a la mente del cliente el recuerdo de un olor, de una canción o de una experiencia.
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Sentimientos
Los sentimientos son uno de los resultados emocionales que provienen de las sensaciones, estos resultados tendrán un alto grado de impacto en el momento de establecer relaciones con los clientes y lograr su fidelización. Todos los objetivos del Marketing Sensorial quieren llegar a generar en el cliente sentimientos positivos, relacionados con la marca y con las características de esta. Los sentimientos tienen mucho valor porque a partir de ellos se fortalece la conexión cliente / marca y se encuentran las soluciones para mantener esta relación a lo largo del tiempo.
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Subconsciente
El subconsciente es la “s” que nos permite abarcar las tres S anteriores. Cuando hablamos de subconsciente, nos referimos a toda la información contenida en los recuerdos, memorias, hábitos e incluso, en las funciones que nuestro cuerpo realiza de manera inconsciente, como la respiración. El marketing sensorial se enfoca en aspectos físicos, sin dejar de lado aquello que no vemos, pero que en el fondo, es la base de la manera de pensar y actuar de cualquier ser humano.
El subconsciente será un aspecto clave para influir en la toma de decisiones de compra: es el enfoque principal del marketing y específicamente del marketing sensorial.
Hoy en día, el mercado tiene a su disposición un sinfín de herramientas física y digitales para analizar y entender a las audiencias; tiene, además profesionales especializados en cada una de estas áreas como lo es la: atención al cliente, la comunicación y la creación de contenido; sin embargo, se ha tenido que analizar la manera en la que estas herramientas se pueden explotar para la creación de estímulos sensoriales, generando una atracción profunda con el cliente, permitiendo la recordación y el fortalecimiento de todo lo que integra la marca en el subconsciente de los individuos.
Sin lugar a duda, es una tarea complicada el apelar a los sentidos; a pesar de que son parte de nosotros, son exigentes, no se convencen con cualquier cosa, tienen parámetros que se han definido por años y que, en el momento de querer manipularlos o cambiarlos, se deberán usar las mejores estrategias y condiciones para lograrlo. No se debe subestimar al marketing sensorial, por el contrario, se debe trabajar fuertemente en él, se debe investigar e innovar para que expanda cada vez más sus límites.
